Triple mirada para ordenar las verdades divinas en el ser...

El ser humano tiene en sí huellas de la Santísima Trinidad, ha sido hecho a imagen y semejanza de Dios. "Del Espíritu nace el conocimiento, del espíritu que conoce surge el amor" (Sta. Benedicta de la Cruz - Edith Stein) imagen y semejanza de la Santísima Trinidad, De Dios Padre nace el Hijo y de ellos surge el Espíritu Santo. Ver al ser humano con una triple mirada es característico de la antropología cristiana.

• En cuanto a espíritu contemplamos el camino de encuentro con Jesucristo, conversión y entrega en las virtudes de fe, esperanza y amor. Camino de santidad trascendente que inicia en la Luz verdadera de Jesús que disipa nuestro caos, confusión y tinieblas, llevándonos al orden de Aquel que nos creó.
• En cuanto al alma contemplamos sus tres potencias: memoria, inteligencia y voluntad, y el desarrollo de las virtudes de: prudencia (mansedumbre, humildad, obediencia), justicia (paciencia, sabiduria, vigilancia), fortaleza (misericordia, generosidad, beatitud) y templanza (pureza, fidelidad y devoción). Es un camino de discernir y optar por el bien real en vez de engañarnos con bienes aparentes. 
• En cuanto a cuerpo contemplamos el carácter oblativo (ofrenda y sacrificio que se le hace a Dios), el carácter esponsal (promesa de alianza de Dios) y la virtud de la virilidad en el hombre y de la feminidad en la mujer.  Como señala el Catecismo de la Iglesia Católica en su numeral 2333 "Corresponde a cada uno, hombre y mujer, reconocer y aceptar su identidad sexual. Ladiferencia y la complementariedad físicas, morales y espirituales, están orientadas a los bienes del matrimonio y al desarrollo de la vida familiar."...

El ser humano está profundamente vinculado desde su creación, por aquellos vínculos efectivos trascendentales que lo vinculan a su Creador, y por aquellos vinculos afectivos que desarrolla en la cotidianidad con su prójimo. Podemos compararle a una tela, donde los hilos que descienden del telar son la urdimbre de aquellos vínculos que tenemos con Dios, la dimensión vertical del ser. Y los hilos que componen la trama son aquellos que tejemos en la cotidianidad con el prójimo. La cultura tolteco-mexica que tenía San Juan Diego contemplaba en la tilma esta perspectiva. Según nos narra el Pbro. Cango. Eduardo Chávez:

"Desde los primeros momentos de la vida, la partera lavaba dos veces al bebé recién nacido y se le ponía nombre y se le colocaba esta tilma como signo de consagración a la divinidad. Así que se usaba la tilam a manera de consagración. La tilma se usaba en el trabajo del campo, para ayudarse en el sustento, ya que en ella se echaba la semilla para irla sembrando en surco de la tierra, y después se recogía la cosecha y el fruto se depositaba en el hueco de la tilma. Así que la tilma era la depositaria del sudor y del trabajo del ser humano. Con la tilma los indígenas tenían una buena protección contra los rayos del sol y con ella se envolvían cuando hacía frío. Así que la tilma era protección y resguardo. Con la tilma se identificaba su nivel social y, por lo tanto, su dignidad, ya que si la tilma tenía colores o dibujos significaba que, quien la portaba, era una persona noble, si era sólo blanca, como la de Juan Diego, el indígena era un macehual. As´´i que la tilma era testimonio de dignidad y nivel social. La tilma también se usaba para el matrimonio, pues cuando se casaban, se anudaba la tilma del varón al huipil o vestido de la mujer y se confirmaba el matrimonio con este signo de unidad. Así que la tilma era unidad y alianza en el amor. Cuando fallecía la persona se le envolvía en su tilma para llevarlo a la tumba. Así que la tilma era el último lugar para el difunto. Por ello la tilma representa la persona misma." (p144 Eduardo Chávez Nican Mopohua Análisis y Reflexión).

Si entendemos que nuestro ser es como esa tilma, compuesta de vínculos efectivos (urdimbre) y vínculos afectivos (trama) podremos ver el profundo significado que tiene en el acontecimiento guadalupano esa frase que dice ... " Y en seguida vino a bajar, vino a traerle a la Niña Celestial las diferentes flores que había ido a cortar, y cuando las vio, con sus venerables manos las tomó; luego las puso de nuevo en el hueco de la tilma de Juan Diego" (Nican Mopohua #134-136) . El padre Chávez lo explica: ..."Otro signo importante que la Santísima Virgen María realizó es el tomar con sus propias manos las flores, que significan la verdad divina, pues surgieron de un lugar imposible para la naturaleza, más no para Dios, y arreglarlas y colocarlas directamente en el hueco de la tilma de Juan Diego, con esto, María, realizó un signo de gran acercamiento con el ser humano, tanto en lo físico, en lo moral, como en lo espiritual; asimismo este gesto significaba que la Madre de Dios acomoda la verdad divina en nuestro interior, es Ella quien dispone, organiza y armoniza la verdade de Dios dentro de nuestro ser". (p 147. Eduardo Chávez. Nican Mopohua Análisis y Reflexión).

La labor de todo terapeuta cristiano parte de reconocer su dignidad humana para así poder reconocer la dignidad humana de su hermano, esta consciencia le permite acercarse con respeto y sacralidad a ayudarle y acompañarle en ordenar las verdades divinas en el interior del ser.